El colmo de la mala suerte se ha cebado con Fernando Alonso y McLaren este fin de semana. El asturiano estrenaba una nueva unidad de potencia en Austria, por lo que recibió una sanción múltiple que se acabó convirtiendo en 25 posiciones de castigo, pero desde la escudería pensaban que ya en Silverstone iban a poder rodar en condiciones normales. Sin embargo, el accidente con Räikkönen ha tenido más consecuencias de las previstas: el motor se ha partido por la mitad en el impacto y ha quedado totalmente inservible, según publica ABC. Esto implica que Alonso tendrá que estrenar otra unidad de potencia, por lo que recibirá una nueva sanción, otras 25 posiciones, y volverá a partir desde la última posición de la parrilla. Además, ya que montará la sexta unidad de algunas piezas, sufrirá el resto de castigo en forma de drive through y stop&go de 5 segundos durante el próximo Gran Premio de Gran Bretaña.
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